Cuando, a sus 28 años, el futbolista inglés David Beckham firmó por el Real Madrid, seguramente no imaginaba que su nombre quedaría ligado, no solo al balompié, sino a un régimen tributario especialmente atractivo para los extranjeros que buscan establecerse en España.
El año 2004 se promulgó la ley española que regula el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Esta norma, entre otros aspectos, instituyó un beneficio fiscal que autoriza a los extranjeros a pagar una menor cantidad de impuestos, a la vez que les declara exentos de declarar ganancias generadas en otros países.
Esta medida no solo tiene como objetivo el incentivar la inversión extranjera; también se busca atraer el talento especializado.
Como el jugador británico fue una de las primeras personalidades en acogerse a este régimen, a nivel popular éste pasó a ser conocido como “Ley Beckham”.
¿Pero cómo afecta esta normativa a quienes no somos deportistas de élite, ni firmamos por uno de los clubes de fútbol más famosos del mundo?
Partamos por explicar que los aspectos principales de esta ley son los siguientes:
- Se aplica un impuesto fijo del 24 % para ingresos hasta 600,000 euros, y del 47 % para montos superiores.
- Las ganancias obtenidas en el extranjero, como acciones, inversiones financieras, propiedades y cuentas bancarias, no están sujetas a impuestos en España.
- Las personas bajo esta ley deben pagar impuestos sobre su patrimonio y grandes fortunas, considerando únicamente los activos ubicados en España, independientemente de los bienes que posean en el extranjero.
La norma está disponible para cualquier extranjero que se mude a España y resida en el país durante más de 183 días, siempre y cuando no haya sido residente fiscal en territorio español durante los últimos 5 años. Además, la razón principal del traslado debe ser la firma de un contrato de trabajo con un empleador en el país.
¿Qué pasa si estás interesado en una visa de Nómada Digital? Es decir, poder residir en España mientras mantienes un vínculo laboral con tu empresa (que se ubica en otro país).
Pues en este caso también aplica la Ley Beckham: tendrás la opción de no tributar en el país ibérico por 5 años. Esto, con excepción de los ingresos que debes demostrar para obtener la visa, los cuales deben ser superiores a 2 sueldos mínimos españoles (€ 2.100 mensuales, a la fecha). De esos ingresos, tendrás que pagar impuestos por un 24%.
Si te interesa la posibilidad de trasladarte a España, ya sea en forma temporal o permanente, o bien quieres diversificar tu patrimonio invirtiendo en ese país, ponte en contacto con nosotros. El equipo de AIM Global te asesorará durante todo el proceso, y te acompañará hasta finalizar el último trámite. Nuestro objetivo es ayudarte a cumplir con tus proyectos de movilidad internacional para ti y tu familia.