A seis meses de que el gobierno ejecutara cambios al programa Golden Visa, el mercado inmobiliario de Portugal sigue mostrando una tendencia al alza en el precio de las viviendas.
Esto viene a demostrar que el mercado portugués sigue ofreciendo oportunidades de inversión, incluso en medio de una inédita caída en los precios en algunos de los países más sólidos de la Unión Europea.
Como informa El País, durante 2023 hubo una disminución de un 1,1%, lo que no ocurría desde la época de la crisis financiera, hace una década. Esto fue más pronunciado en Alemania y Francia; por su relevancia en el mercado europeo, los resultados en estos países fueron determinantes en la tendencia a la baja que mostró el Índice de Precios de Vivienda de Eurostat a nivel de la zona Euro.
Pero como mencionamos al principio, en otros países se registró un alza. En España, por ejemplo, la subida de precios fue de un 4,3%; en Portugal, por su parte, el aumento fue de un 8,2%.
¿Dónde se concentran las preferencias de los inversionistas? Principalmente en ciudades como Lisboa, Oporto y Faro, ya sea para inversiones comerciales o residenciales. Según el portal inmobiliario Novvanest, allí se observan cifras de rentabilidad del alquiler de entre un 4 y un 6%.
La rentabilidad del alquiler quiere decir el ingreso anual por alquiler de una propiedad dividido por su precio. Así, en el conocido sector turístico de Algarve, esta cifra va del 5% al 7%, especialmente si se trata de propiedades cercanas a las playas o a lugares como campos de golf.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística portugués apoyan estas estimaciones. Según sus cifras, los precios de la vivienda han aumentado un 61,8% en los últimos 5 años. Esto significa que -por ejemplo- si alguien compró una villa en el Algarve por US$ 425.000 hace cinco años, esta valdría hoy unos US$ 688.000.
Pero los precios no son el único atractivo de Portugal. También hay que tener en cuenta su estabilidad. De acuerdo al Informe Anual 2023 del Índice de Fragilidad de los Estados, elaborado por The Fund For Peace, la nación lusa figura con un puntaje de 27.5, bien situado en el espectro internacional (a manera de comparación, Finlandia tiene un puntaje de 16.0, mientras que los Estados Unidos tienen 45.3).
En los últimos 10 años, Portugal no solo ha logrado mantener una estabilidad económica y social, también ha logrado reducir su deuda pública, siendo actualmente uno de los países menos endeudados de la Unión Europea, en lo que algunos expertos consideran un verdadero milagro económico.
Por otra parte, proyecciones del Fondo Monetario Internacional estiman una tasa de crecimiento del 1,7% para 2024, levemente superior a la de 2023. Por otro lado, el PIB per cápita medio ha variado positivamente en un 5,0% en los últimos cinco años. Esto apunta a una población con más recursos disponibles para invertir o arrendar propiedades, entre otros aspectos.
¿Podríamos decir entonces que el panorama actual del mercado inmobiliario portugués es positivo? Para el portal Investropa, la respuesta es sí. Las cifras de crecimiento económico y PIB, sumado al hecho de que la cantidad de nuevos proyectos inmobiliarios no se ha incrementado, permiten estimar que “habrá un crecimiento en el número de arrendatarios con altos ingresos”, lo que a su vez producirá un incremento en la rentabilidad del alquiler.
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